Clases prácticas y muy divertidas: ¡desde la detección de almidón en los alimentos o la observación de plantas en los jardines de nuestro centro, al estudio de las capas concéntricas de la tierra con un aguacate o la creación de un diccionario extremeño!

¿Quién dijo alguna vez que las clases deben ser monótonas y aburridas? Está científicamente probado que los alumnos aprenden más cuanto más práctico y multisensorial es el aprendizaje, de modo que puedan emplear todos los sentidos a su alcance. Se trata de que toquen, huelan, prueben… Con este objetivo arranca un año más Science Vegas, nuestro proyecto de Ciencias con el que se hacen toda clase de experimentos científicos, de modo que los alumnos, rodeados de probetas y tubos de ensayo, puedan poner a prueba sus conocimientos de un modo muy práctico y divertido. Con ello se intenta, además, despertar vocaciones científicas a una edad temprana.

En este contexto, nuestros alumnos de 1º de ESO han puesto en práctica esta semana el modelo científico a través de la detección de almidón en los alimentos. Para ello han teñido los alimentos con lugol, pudiendo observar así si contienen fécula de patata. Con este experimento han aprendiendo la importancia de ser rigurosos en el estudio científico y la relevancia del etiquetado de los alimentos.

Asimismo, en estas primeras semanas de clase, cuando aún hace buen tiempo, hemos aprendido Biología de la mejor manera posible: al aire libre, aprovechando nuestros jardines con sus árboles y plantas. A muchos de los conocimientos curriculares aprendidos en clase de manera más teórica solo les damos sentido cuando llegamos a ver y palpar lo que nos rodea. ¿Tú también prefieres estudiar Biología al aire libre? ¿Acaso el aire puro y la vitamina D que produce nuestro cuerpo cuando se expone al sol no son ya motivos más que suficientes para que salgamos a observar la naturaleza?

Pero quizás una de las actividades más singulares que hemos realizado en estos primeros días de curso sea aprender Geografía, dentro de nuestro proyecto “Tocar la Geografía”, utilizando un aguacate. Sí, en 1º de ESO hemos abierto un aguacate para analizar las capas concéntricas de la Tierra: corteza, manto y núcleo. Y es que los aguacates, además de ser un alimento muy sano y nutritivo, también pueden servir para aprender geografía de un modo un tanto diferente.

Por su parte, también en el área de las humanidades es posible hacer clases muy prácticas y divertidas y, por eso, ¡estos días la clase de Lengua de 2º de ESO se ha trasladado a la biblioteca! Durante varios días, nuestros alumnos han estado trabajando en la elaboración de un pequeño diccionario de nuestra variedad extremeña. Para ello han investigado por las redes y preguntado a sus familiares, especialmente a sus mayores (¿quiénes mejor que ellos para conocer nuestras raíces lingüísticas?). En muchos casos han podido conocer algunas expresiones apenas utilizadas ya, mientras que en otros se han sorprendido del origen extremeño de ciertas palabras tan frecuentemente empleadas.